MIAMI | Como cada año, desde hace 62 años, los devotos de la Virgen de la Caridad celebraron a su patrona en su día, el 8 de septiembre, en su propio santuario y por tercer año consecutivo.
Vistiendo de amarillo y con una estola con la bandera cubana en el cuello, Oneida Collado asistió a la celebración de la Virgen de la Caridad de este año, en la Ermita de Miami.
Desde la izquierda, las hermanas Oneida Collado, Orfelina Collado y Dalia Denkas, integrantes de la Archicofradía de la Virgen de la Caridad de Miami, esperan el inicio de la celebración de la Virgen de la Caridad de este año, en el Santuario de la Ermita de la Caridad, en Miami, el 8 de septiembre.
Fotógrafo: ROCIO GRANADOS | LVC
Desde la izquierda, las hermanas Oneida Collado, Orfelina Collado y Dalia Denkas, integrantes de la Archicofradía de la Virgen de la Caridad de Miami, esperan el inicio de la celebración de la Virgen de la Caridad de este año, en el Santuario de la Ermita de la Caridad, en Miami, el 8 de septiembre.
Collado llegó a Miami hace más de 50 años de su natal Cuba y recuerda la celebración a la Virgen que se realizó en esa época, en el Marine Stadium de Miami. “Fue maravilloso”, dijo y agregó que había mucha gente y fue muy emotivo porque la imagen venía por el mar.
Celebrar a la Virgen de la Caridad cada año “es algo muy importante, porque somos católicas y somos muy de la Virgen de la Caridad toda la vida”, agregó Collado, quien asistió a la celebración con sus dos hermanas; Orfelina Collado y Dalia Denkas.
Collado y sus hermanas estuvieron presentes cuando pusieron la primera piedra de lo que sería el santuario de Nuestra Señora de la Caridad, conocida como la Ermita. “Era una casita y ahora es la cocina de las monjitas (las Hijas de la Caridad que atienden el santuario). Hemos tenido el privilegio de estar presentes también cuando se inauguró la Ermita”.
Las hermanas integrantes de la Archicofradía de la Ermita de la Caridad contribuyeron “quilo a quilito” a la construcción del templo, como decía el recordado Mons. Agustín Román “y eso era cierto, así fue”, agregaron.
Las hijas y nietas de los integrantes de la Archicofradía de la Virgen de la Caridad de Miami portan la bandera de Cuba, momentos antes de iniciar la Misa de celebración de la Virgen de la Caridad, en su día, el 8 de septiembre, en la Ermita de Miami. Las acompaña a la derecha, Teresa Núñez Pérez, presidenta de la Archicofradía.
Fotógrafo: ROCIO GRANADOS | LVC
Las hijas y nietas de los integrantes de la Archicofradía de la Virgen de la Caridad de Miami portan la bandera de Cuba, momentos antes de iniciar la Misa de celebración de la Virgen de la Caridad, en su día, el 8 de septiembre, en la Ermita de Miami. Las acompaña a la derecha, Teresa Núñez Pérez, presidenta de la Archicofradía.
Integrantes de la Archicofradía de la Virgen de la Caridad de Miami portan los estandartes de los Municipios de Cuba durante la celebración de la Virgen de la Caridad de este año, en el Santuario de la Ermita de la Caridad, en Miami, el 8 de septiembre.
Fotógrafo: ROCIO GRANADOS | LVC
Integrantes de la Archicofradía de la Virgen de la Caridad de Miami portan los estandartes de los Municipios de Cuba durante la celebración de la Virgen de la Caridad de este año, en el Santuario de la Ermita de la Caridad, en Miami, el 8 de septiembre.
Hace 57 años, Mons. Coleman Carroll, el primer Obispo de la Diócesis de Miami, le pidió al exilio cubano que “erija un santuario como testimonio del profundo cariño que siente por su patrona, la Virgen del Cobre…”, dijo el P. Elvis González, párroco de St. Michael the Archangel, en Miami, durante la homilía de la celebración.
El Arzobispo Carroll donó el terreno junto a la Bahía de Biscayne, donde se construyó la Ermita, y seis años después, “bajo el liderazgo del recordado Mons. Román y por el esfuerzo y la generosidad del pueblo cubano en el exilio, centavo a centavo, se pudo edificar esta casa dedicada a la Madre de Dios y Madre nuestra”, indicó el P. González.
A lo largo de estos casi 50 años, “muchos hijos e hijas de Cuba en la diáspora y también muchos hombres y mujeres de diversos rincones del mundo, hemos encontrado refugio y consuelo en la casa de nuestra Madre”, agregó el P. González.
Esta Ermita de la Caridad, que el próximo 2 de diciembre cumple 50 años de su consagración “para la gloria de Dios y honor de la Bienaventurada Virgen María, debe continuar hoy, y en los años venideros, realizando la misión para la cual fue edificada: servir como fuente de consuelo y luz del Evangelio para todo un pueblo hambriento de Dios: un pueblo, a veces confundido, con poca formación en su fe, pero con un inmenso amor por la Virgen de la Caridad”, dijo el Arzobispo Thomas Wenski, quien celebró la Misa conmemorativa concelebrada por varios sacerdotes arquidiocesanos.
Marité Alfonso canta durante la Misa de celebración de la Virgen de la Caridad, en los exteriores de su santuario en Miami, el 8 de septiembre de 2023.
Fotógrafo: ROCIO GRANADOS | LVC
Marité Alfonso canta durante la Misa de celebración de la Virgen de la Caridad, en los exteriores de su santuario en Miami, el 8 de septiembre de 2023.
Este año, alrededor de 9,000 devotos visitaron el santuario el 8 de septiembre, el día central, para honrar a la Patrona de Cuba y copatrona de la Arquidiócesis de Miami, y unas 4,000 lo hicieron al día siguiente, indicó Grace Veloz, directora de desarrollo de la Ermita. Agregó que se ha visto un aumento en la cantidad de devotos, incluyendo a personas de Centro y Sudamérica.
La ceremonia principal empezó por la tarde, con el rezo del rosario. El arribo de los movimientos apostólicos arquidiocesanos presidió la entrada de la imagen de la Virgen, en hombros de seis jóvenes de la Arquidiócesis que participaron en la Jornada Mundial de la Juventud en Lisboa, Portugal, el pasado agosto.
Este año, el rezo del rosario fue por “la libertad de Cuba y de todos los pueblos. También por los presos políticos en Cuba, en Nicaragua, en Venezuela, y en especial por Haití, que está pasando una crisis”, dijo el P. José Espino, rector de la Ermita de la Caridad.
Pedimos a la Virgen de la Caridad “su intercesión ante su Hijo Jesús, por el pueblo de Cuba y por tantas naciones que hoy exigen dignidad, que claman a gritos que se les respeten sus derechos, que hoy simplemente piden vivir en paz y que se levante la mordaza que les impide expresar su espíritu libre, y puedan reconstruir una patria de todos y para todos”, dijo el P. González.
Muchas familias cubanas en estos casi 65 años “han sufrido los estragos de una ideología que solamente ha sembrado luto, miseria y destierro”, agregó el sacerdote, y continuó diciendo que, “mientras los lideres de este sistema represor se aferran en el poder, movidos por el egoísmo y la ambición, muchas familias cubanas padecen hambre, carecen de medicinas, sus jóvenes son forzados a abandonar sus hogares en busca de una mejor vida, sus ancianos no viven una vejez digna, se les inculca a los niños un falso patriotismo y se predica una libertad camuflada por el control, la intimidación y la represión”.
Pero también Nicaragua vive “una noche oscura”, indicó el P. González. Muchas familias aún lloran a sus estudiantes muertos en el 2018. Miles de familias viven la separación y el destierro. Muchas voces de sacerdotes, religiosos y seminaristas han sido silenciadas. Mons. Rolando Álvarez, Obispo de Matagalpa, Nicaragua, por predicar a Cristo con su vida, fue condenado a prisión y confinamiento por más de 26 años.
Andreimar Mata, una joven venezolana reza durante la celebración de la Misa de la Virgen de la Caridad en su santuario, el 8 de septiembre de 2023.
Fotógrafo: ROCIO GRANADOS | LVC
Andreimar Mata, una joven venezolana reza durante la celebración de la Misa de la Virgen de la Caridad en su santuario, el 8 de septiembre de 2023.
“Esta noche, elevamos nuestras súplicas por la Iglesia perseguida de Nicaragua y el mundo entero”, dijo el sacerdote.
Señaló que también Venezuela sufre las sombras de la noche oscura. Muchos venezolanos han muerto en la jungla del Darién tratando de buscar un futuro y sustento para sus familias. Muchos venezolanos dentro y fuera de su país claman contra “la escasez de justicia, la escasez del respeto a los derechos humanos y muestran al mundo las heridas del abuso y la tortura causada por corazones duros que solamente buscan su propio interés”.
Y no se puede olvidar al pueblo de Haití: “Ellos también sufren la escasez material y también de esperanza”, indicó el sacerdote, y agregó que el país se encuentra asfixiado por la corrupción alimentada por el crimen organizado. Abunda la miseria, y la indiferencia mundial ha dejado en el olvido a esta pequeña nación.
La celebración a la Virgen de la Caridad número 62 terminó con fuegos artificiales en honor a la madre de todos, porque “la Virgen de la Caridad no es exclusivamente de los cubanos, ya la tenemos que compartir”, agregó Veloz.
Miles de devotos de la Virgen de la Caridad del Cobre asistieron el 8 de septiembre de 2023 a su santuario en Miami a celebrar su fiesta.
Miles de devotos de la Virgen de la Caridad del Cobre asistieron el 8 de septiembre de 2023 a su santuario en Miami a celebrar su fiesta.